El proceso de los hábitos



Los hábitos vienen a ser sentido común organizado, según la definición del Dr. Stephen Covey, quien definió que la forma de desarrollar hábitos pasa por un proceso de desarrollo personal, este proceso hace a las personas más capaces para alcanzar sus propias metas, además permite desarrollar mejores relaciones con las personas que nos rodean.

El hábito de desarrollar proactividad

La proactividad significa ser una persona de acción, tomar decisiones y asumir responsabilidades. El hábito de ser proactivo (1er hábito) se refleja en nuestras acciones profesionales, personales, familiares, conyugales, se aplica en la mayoría de actividades que realizamos en la vida diaria. El proceso es corto, primero decidimos y después ejecutamos. Particularmente me gusta mucho el concepto de responsabilidad pues es el principio de buenas relaciones humanas para desarrollar interdependencia, significa ser empático, tomando la firme decisión de ayudar, servir, asumir nuestras propias acciones, llegar temprano, esforzarse por cumplir, cuidar el medio ambiente, etc.

Por ello nuestros valores influyen positivamente en nuestra conducta antes que las emociones, lo que permite que cualquier condición por la que pasamos puede ser superada por nuestras propias decisiones: si no sé entonces tengo que aprender, si no tengo dinero entonces tengo que trabajar más, si no me alcanza entonces tengo que dejar de gastar, si no puedo entonces tengo que esforzarme más o pedir ayuda.

El hábito de empezar con el objetivo

El futuro se construye con las acciones que hemos realizado, por ello empezar con el fin en mente (2do hábito) nos permite cumplir metas y objetivos. Los sistemas de gestión más desarrollados utilizan la misión y visión para lograr grandes metas. Toda persona tiene la capacidad de desarrollarse y lo primero que hace es pensar para darse una idea del resultado final. Tener un objetivo está enmarcado en el principio anterior, pues antes de decidir o tomar acción, visualizamos el resultado final en la mente.

Este hábito aporta efectividad en nuestro proceso de desarrollo pues al plantear metas, otorgamos significado a las acciones tomadas, determina un fin específico. Se aplica en pequeñas decisiones cotidianas así como en grandes proyectos, cuando elaboramos un planeamiento estratégico de negocios, o asumimos una misión para con la sociedad, los animales, el medio ambiente; significa propósito.

El hábito de establecer prioridades

En la toma de decisiones, pasamos también por un proceso que tiene una estructura ordenada, con lo cual se establecen prioridades y donde es importante poner primero lo primero (3er hábito). Esta etapa es importante pues las prioridades se debe atender primero, de otra forma los temas secundarios se convertirán en nuestro día a día, sucede a menudo en el ámbito laboral cuando escuchamos que estamos "apagando incendios", perdemos tiempo solucionando problemas. Y esto es debido a que no asumimos el compromiso de organizarnos, usualmente es una responsabilidad gerencial pero también un compromiso de los colaboradores de una organización.

Pero también sucede en nuestra vida diaria: antes de comprar primero debo saber si tengo lo suficiente, antes de firmar un contrato primero tengo que leerlo y entenderlo, antes que se me acabe las provisiones primero tengo que saber cuánto consumo, antes de casarme debo estar seguro si es con la persona adecuada, antes de salir a divertirme debo haber cumplido primero mis obligaciones, antes de enseñar primero debo aprender, para levantarme temprano tengo que descansar y acostarme temprano. Para ser personas disciplinadas, lo más importante es aprender a elegir nuestras prioridades, de esta forma podremos decidir adecuadamente. Igualmente se aplica en el ámbito empresarial.

El hábito de buscar el beneficio común

Cuando decidimos ser independientes y encontramos que nuestras acciones benefician a otros, damos el primer paso para ser interdependientes y podemos pensar en ganar-ganar (4to hábito). Debido a ello, nuestras decisiones se toman considerando lo mejor para el colectivo, compartiendo nuestras cualidades, virtudes, conocimientos, pertenencias, buscando siempre el bien común. Este principio se fundamenta en un estado de madurez muy amplio, pues el principio de abundancia implica romper el paradigma de tener "menos" o quedarse con "casi nada".

Todo ser humano tiene la capacidad y el potencial para desarrollar sus talentos y virtudes logrando su propio crecimiento y de quienes lo rodean, pero este proceso se ve limitado cuando sus decisiones no permiten visualizar la abundancia que tiene a su alrededor. Una actitud positiva frente a la vida, le permitirá solidaridad, abnegación y facilidad para ser empático con los demás.

El hábito de comprender la situación

Practicar la empatía significa entender la situación de los demás. Es así que primero se debe entender para luego ser entendido (5to hábito). Este proceso implica la comprensión de las cosas, que es muy diferente a la percepción. El proceso inicia con el aprendizaje, es buscar comprender una situación, un problema, un análisis, iniciar una investigación. Teniendo información recién se puede tomar una decisión y formular acciones. En el ámbito profesional, la característica fundamental en personas de contacto con clientes es ser empático para comprenderlo y servirlo. La aplicación práctica de este proceso nos hace entender a otras personas, con el propósito de justificar sus emociones o acciones, no para "percibir" lo que pasa o "etiquetar" su comportamiento o actitud, sino para comprenderla de manera que cooperemos activamente en la solución.

El hábito de crear sinergia

Esta cooperación con los demás no solo logra fortalecer el vínculo sino que permite sinergizar (6to hábito) para trabajar en conjunto y obtener mucho más que la suma de las individualidades. El trabajo en equipo nos permite lograr más de lo esperado pues se desarrolla la confianza, la creatividad y el desempeño. Es por ello que en las empresas altamente eficientes, el grupo humano se consolida cuando la gestión deja de ser departamental para orientarse a procesos.

Para obtener altos niveles de cooperación es fundamental valorar a las personas pues cada una de ellas tiene ideas, conceptos, creencias y conocimientos diferentes, por lo tanto si solo las aceptamos o toleramos, no estamos siendo lo suficientemente permisivos y abiertos a nuevas posibilidades pues si no valoramos a las personas haremos lo propio con sus aportes. Esa misma actitud se entenderá inmediatamente en nuestra respuesta, por lo que después no será fácil transmitir nuestros propios aportes.

El hábito de mejorar constantemente

Los hábitos no son técnicas, se basan en valores que se tienen que construir a lo largo de mucho tiempo, por lo mismo es importante afilar la sierra (7mo hábito) que significa mejorar. En ingeniería industrial se le conoce como mejoramiento continuo, aseguramiento de la calidad, cero defectos es la filosofía de la perfección en producción. Pero en la vida diaria también significa aprender, mejorar, ayudar, contribuir. Si pensamos que no podemos ser perfectos nunca lo llegaremos a ser, entonces por lo menos debemos exigirnos el compromiso para hacer las cosas correctamente, con la responsabilidad de que nuestras acciones no afecten a los demás y logremos el continuo de madurez señalados por el autor.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR:


....................................................

ACERCA DE MÍ
Pedro Bermudez Talavera es experto en marketing digital. SEO. SEM. Social Media Marketing. Content Marketing. Analytics.
Website: pedrobermudeztalavera.com



Leer más artículos

Venta de productos tangibles e intangibles

Opinión sobre creatividad

Reflexión sobre la voluntad

Diferencias entre ATL y BTL

El plan de marketing estratégico

Fases de la comunicación comercial